A María Cristaldo la mataron para cobrar su seguro. / Foto: ARCHIVO

9 Feb, 2015 | La Fiscalía venezolana ha acusado a 14 personas de estar presuntamente involucradas en el asesinato en Venezuela de la turista española-paraguaya María Cristaldo, una muerte de la que supuestamente el inductor fue su marido, informó este lunes el Ministerio Público (MP) en un comunicado.

La Fiscalía ha solicitado a un tribunal del estado de Zulia, en el noroeste del país la admisión de la acusación y el enjuiciamiento de las 14 personas, así como que se mantenga la medida privativa de libertad de todos los procesados que permanecen recluidos en los locales de la policía del municipio San Francisco, según el escrito.

Los acusados son el ciudadano español Jesús González, esposo de la víctima, y los venezolanos Juan Criollo, Humberto Palmar, Thomas Ramírez, Miguel Duvergel, Ericson Machado, Jean Fernández, Deivis Valero, Fabiola Machado, Leonardo Moreno, Oscar González, Leida Pimentel, Desiré Ocando y Genovez Corso.

Al esposo de Cristaldo se le acusa de ser el "determinador" (inductor) del delito de "femicidio (asesinar a una mujer) agravado, asociación para delinquir y simulación de hecho punible", señala la Fiscalía.

Duvergel, Fabiola Machado, Moreno, Oscar González y Pimentel figuran como "cómplices necesarios" del crimen cometido el pasado 15 de diciembre de 2014.

Mientras que Criollo, Palmar, Ramírez, Ericson Machado, Fernández y Valero son "presuntos cómplices no necesarios en la ejecución de los citados delitos".

Adicionalmente, Ocando ha sido acusada por aprovechamiento de cosas provenientes del delito; mientras que a Corso le acusaron por posesión ilícita de arma de fuego.

Las autoridades venezolanas indicaron que González planeó el crimen con el fin de cobrar el seguro de vida de Cristaldo, de 100.000 euros.

El matrimonio, que había contraído nupcias en mayo del pasado año, tomó un taxi no regularizado y el conductor los llevó a un lugar apartado de un popular barrio de Maracaibo en el estado de Zulia.

Jesús González narró entonces que él y su pareja fueron trasladados a un descampado donde un grupo de maleantes los esperaban y que, tras robarles, les instaron a abandonar el lugar corriendo y sin mirar atrás mientras les disparaban.

En el momento en el que huían, uno de los disparos alcanzó en la cabeza a Cristaldo, que posteriormente falleció.

Sin embargo Duveroel, amigo del esposo de la víctima, confesó poco después a las autoridades que el crimen había sido planeado por él y González para cobrar el seguro de vida de la mujer y por el que habrían pagado unos 2.000 euros a los autores materiales.