El peso de los camiones puede hacer colapsar las tuberías. / Foto: GLADIFER ALBORNOZ

29 Jul, 2016 | Los residentes del sector Mundo Nuevo en Los Robles, municipio Maneiro, están hartos de que camiones de carga pesada circulen por sus calles, los cuales además de poner en riesgo los servicios públicos y vialidad, están explotando ilegalmente los cerros aledaños de esta comunidad cuando este no es una cantera.

Los habitantes de la zona han tratado de evitar esta situación y colocaron una barricada hecha de tierra al final de la calle Las Palmas para evitar el paso de maquinaria pesada pero la mañana del miércoles llegaron con un tractor que la derribo rápidamente, comenzando así el desfile de camiones.

Ulises Domínguez, residente de este urbanismo, relató que los vecinos trancaron el paso de los camiones porque eran demasiado pesados y temían que su paso comprometiera las tuberías que tanto lucharon por que instalaran.

Reseñó que apenas hace seis años colocaron los servicios e instalaron la red de cloacas en la zona, pero a la fecha no han logrado que entre una gota de agua al sector, por lo que no están dispuestos a permitir que deterioren su calidad de vida con la destrucción de la calles.

Los habitantes de la zona afirmaron que la explotación ilegal de los cerros para obtener material de relleno para las construcciones es un ecocidio y que el Ministerio de Ecosocialismo y Aguas debe estar al tanto de la situación y no hacerse de la vista gorda.
Domínguez comentó que los transportistas afirmaron que al obstaculizar el paso a la zona montañosa estaban impidiendo la realización de un urbanismo planificado por la Gran Misión Vivienda Venezuela.

Los vecinos decidieron seguir a los camiones y constataron que estos estaban siendo dirigidos hacia los terrenos de la avenida La Auyama en el municipio Mariño, donde se levanta un urbanismo de la GMVV.

DELINCUENCIA
En el sector Mundo Nuevo en Los Robles, municipio Maneiro, se han registrado varios robos desde que se comenzó la extracción de arena en las zonas aledañas. Quienes hacen vida en este lugar afirmaron que las casas que han sido robadas fueron grafiteadas con siglas como UBT, OMA, MPC y PJRB.

“La mayoría de los vecinos hemos tenido que subir las paredes perimetrales y colocar cercado eléctrico para evitar los robos, pero al llegar la noche esto es una boca de lobo”, dijo Domínguez.