10 Dic, 2016 | Así como las empresas tienen sus cierres cada mes y año, nosotros también podemos hacer un balance de cada paso dado. De esta manera podremos ajustar cuando sea necesario y acercarnos cada día más a las metas propuestas.

Con la llegada de diciembre significa que han transcurridos unos prolongados meses y es aquí cuando empezamos a cuestionarnos y evaluar como ha sido dicho recorrido, revisar si algunas de nuestras metas o sueños se han logrado.

Convierte tu balance personal anual en un ejercicio divertido haciéndolo un hábito, llevándolo a la práctica cada año.

Si quieres saber cómo fue tu año, te dejo estas preguntas que desde mi propia experiencia me han sido útiles y le han dado claridad al resultado de mi propio balance personal.

Toma lápiz, papel y tiempo, y prepárate para ser claro con la respuesta.

1- ¿Cuáles fueron tus metas y esperanzas para este año?

Por lo general las metas se escriben, se planifican, el hacer un vistazo de los meses pasados cuesta, pero es importante hacerlo.

Sé siempre amoroso contigo mismo independientemente de los resultados obtenidos, se trata de ver también la persona quien hoy en día eres y la persona que eliges ser.

2- ¿Qué metas lograste y cómo te sientes con tu resultado?

No dejes que solo el logro de una meta sea lo que te haga feliz, sino como te sientes con relación al camino que elegiste, como lo hiciste, que tan fácil o duro fue el alcanzarlo.

Decide si tomarías el mismo camino, que nuevas experiencias te llevas de este nuevo logro y cuan optimistas te sientes sobre tu persona.

3- Circunstancias “buenas o malas” no existen

A veces por ignorancia, tomamos decisiones erróneas o buenas, en diferentes circunstancias de nuestras vidas.

Esto no quiere decir que te haga buena o mala persona, piensa en ti y corrige tu vida y cambia, transfórmate con todos los derechos de prosperidad que el universo te ofrece.

No veas a lo que llamamos circunstancias malas como a una derrota, míralo como un aprendizaje y saca lo mejor de esa experiencia y aplícalo para posibles metas futuras.

4- ¿De qué cosas estás agradecido este año que finaliza?

El ser agradecido independientemente de que hayas alcanzado tus metas es una destreza muy bonita, no solo para apreciar lo que tienes, sino para mantenernos que estamos vivos y existimos.

El sólo hecho de levantarte y estrenar un nuevo día, eso se da fuerza para seguir adelante, el hábito de agradecer te ayuda a ver las cosas de una manera positiva, donde sin darte cuenta te enfocas en lo positivo y no en lo que no tienes. Empiezas a fluir en lo que realmente te gusta hacer.

5- ¿Cuáles creencias crees que lideran tu vida? ¿Las que te limitan o las que te empoderan? ¿Qué te llevó al logro o no de tus metas?

Las creencias dirigen nuestras vidas. Ellas te llevarán más cerca o lejos de tus metas.

Tómate un café contigo, detente a pensar cuales son las creencias que vienen a tu mente, reconócelas y apúntalas.

Me limitan: Yo no soy bueno en los idiomas.

Me empoderan: Soy buena para los idiomas.

6- En la actualidad, ¿cuál es la mejor versión de ti que predomina?

Para saber la mejor versión de ti mismo, me plantearía esta pregunta: ¿Quién eres? A partir de saberlo esto puedes mejorar tu propia versión, identificando las virtudes que lo conforman, saliendo también de tu zona de confort y tomando la responsabilidad de tu vida.

Si las cosas no salieron como querías, responderte estas preguntas te dan una perspectiva sobre qué mejorar, confía en ti ¡Tú ya puedes lograrlo!