El presidente argentino reclamó que los casos judiciales no "se dilaten décadas" porque "eso trae mucha frustración, mucho resentimiento, mucho enojo y no corresponde en esta etapa / Foto: EFE

19 Ene, 2017 | El presidente argentino, Mauricio Macri, pidió hoy una Justicia "más eficiente, más cercana" y "que dé respuestas" para no generar "resentimiento" y "frustración" en la sociedad, como ocurre con el caso sobre la muerte del fiscal Alberto Nisman, de la que se acaban de cumplir dos años.

"Necesitamos una Justicia más eficiente, más cercana, que dé respuestas", afirmó hoy el mandatario en un acto en la Casa Rosada, sede del Ejecutivo argentino, donde se firmó un convenio para reorganizar competencias entre el Poder Judicial federal y el de la capital del país.

Macri recalcó que cada organismo del Estado debe "asumir las responsabilidades que le corresponden" y que la Justicia "tiene que tener herramientas de evaluación para ver qué es lo que hace cada juez" y "en qué tiempos".

En ese sentido, recordó que este miércoles se cumplió el segundo aniversario de la muerte del fiscal argentino Alberto Nisman -encargado hasta su fallecimiento de investigar el aún impune atentado contra la mutua judía AMIA de Buenos Aires, que dejó 85 muertos en 1994- sin que se haya logrado dirimir si fue un suicidio, un suicidio inducido o un homicidio.

Además, cuatro días antes de ser hallado muerto en su domicilio, con un disparo en la sien, Nisman había denunciado a la entonces presidenta, Cristina Fernández (2007-2015), por presunto encubrimiento a ciudadanos iraníes sospechosos del ataque.

Por ello, el presidente argentino reclamó que los casos judiciales no "se dilaten décadas" porque "eso trae mucha frustración, mucho resentimiento, mucho enojo y no corresponde en esta etapa de la Argentina".

Macri estuvo acompañado en el acto por el alcalde de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, y por el ministro de Justicia, Germán Garavano, además de otros altos cargos del Gobierno y funcionarios judiciales.

El convenio firmado hoy por el presidente impulsará una transferencia progresiva de competencias, personal y otras instancias de la Justicia penal ordinaria que ahora están en manos de los fueros federales al ámbito de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, para que quede organizado de una forma similar a lo que ocurre en las provincias.

De esa forma, "los vecinos de la ciudad de Buenos Aires" pondrán los "conflictos" que tengan "en la vida diaria a través de un Poder Judicial propio, dinámico" y cuyos cargos sean elegidos también en el ámbito legislativo porteño, en lugar de en el nacional.