Carlos Leiros, margariteño, considera fundamental las alianzas de sectores público y privado. / Foto: JHONNATAN BENÍTEZ | @jhonnaphoto

1º Jun, 2017 | Dentro del sector privado, el Grupo Empresarial Leiros confirma su total apoyo a la revitalización del Museo Marino de Margarita, localizado en Boca del Río, municipio Península de Macanao, institución que reabrirá sus puertas el próximo 15 de julio.

Contemplan dos fases que involucran la apertura con actividad cotidiana similar al período previo a su “cierre técnico” de hace algunos meses, y una segunda etapa, a concretarse en dos años, mediante incorporación tecnológica e interactiva, sumado a un plan para hacer de dicho Museo una institución autosustentable.

Carlos Leiros, presidente de la referida organización empresarial y joven ejecutivo sensibilizado con el tema de la cultura, entiende la responsabilidad social empresarial con base en una filosofía más humana, y de allí que desde enero pasado ha sostenido reuniones con directivos de la Fundación Museo del Mar, intercambiando ideas.

“Nosotros como organización tenemos mucho que agradecerle a la Isla y a sus habitantes. Aun cuando mis padres no nacieron en Venezuela, aquí echaron sus raíces”.

Aclaró que tal querencia no sólo involucra el mundo de los negocios y del mercadeo, sino que trasciende y extiende sus ramas, cual árbol que da frutos, hacia un entorno afectivo de familiares nacidos aquí (como él), clientes y relacionados.

Su papá, Manuel Leiros, creador del Grupo Leiros, aun cuando actualmente no se dedica al diarismo empresarial, siempre tiene la palabra oportuna para sus hijos y les transmite la certeza de que la Isla tiene mucho futuro. Su mamá, Giovanna Pampinella, ya fallecida, siempre vio en Margarita ese atesorado y cálido espacio para vivir.

“Es así que mientras el negocio va creciendo durante estos 40 años, te das cuenta que otras cosas comienzan a ser importantes, y entre éstas el tema del Museo Marino hoy nos enamora y cautiva”.

Explica que durante tres años analizaron proyectos de cómo generar un aporte importante para el desarrollo insular “y nos dimos cuenta que el Museo era una institución digna de apoyar. Nuestra responsabilidad social empresarial está identificada con la gente. Vamos más hacia las acciones que aseguren beneficios para todos sus habitantes, y que a la vez sean autosustentables”.

“Entonces vimos en el Museo Marino esa cosecha de conocimientos que ayuda tanto a la Isla, desde el punto de vista de la motivación para la preservación del medio ambiente y la defensa del ecosistema marino, como la labor a favor de la infancia”.

Recordó que desde los años 60 este Museo ha dado aportes gigantescos en materia científica y del conocimiento, en especial a esos miles de niños que lo han visitado.

Por eso luce entusiasmado al coadyuvar para que este 15 de julio reabra sus puertas al público, justo en temporada escolar. “Los acompañaremos en todos sus programas y nos involucraremos en el presupuesto que se requiere para tal operatividad, como parte del paquete de soluciones”.

“Luego viene una segunda fase, igual de bonita y que involucra al sector privado y también al público, con el respaldo incluso del Ejecutivo regional para un proyecto de mejoras del malecón y de todo el entorno del Museo en Boca del Río. Tanto el gobernador Carlos Mata Figueroa como su esposa Alejandra de Mata están motivados para concretar este plan e inversión integral”.

“Dentro del sector empresarial vamos a invitar, asimismo, a otros compañeros y aliados comerciales para que se sumen a estos proyectos a desarrollar. La idea es que el Museo sea autosustentable y luego no dependa de nadie, con aporte de todos”, reitera.