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28 de marzo de 2024





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Un deber moral
Esta Constituyente es una auténtica expresión de democracia, elegiremos 545 constituyentes, donde en una forma directa y profunda se amplía el horizonte, en cuanto a participación de todos los sectores del país y del territorio.
Mireya Mata | mireyamatanota@gmail.com

25 Jul, 2017 | Ineludible e inexcusable. Votar es, además, un derecho humano que no se puede impedir a nadie. Sobre la recta final y a pocos días de la cita del 30 de julio por la Constituyente, levantamos la voz para alertar sobre la necesidad de concurrir, sin excusas, a depositar su voto-compromiso, para lograr, en primer lugar, la paz, base fundamental para levantar el resto de la obra restauradora, profundizadora de las ideas y fórmulas del Plan de la Patria. Esta Constituyente es una auténtica expresión de democracia, elegiremos 545 constituyentes, donde en una forma directa y profunda se amplía el horizonte, en cuanto a participación de todos los sectores del país y del territorio. Cada aspirante a constituyente presenta su propuesta para la solución de los problemas y para abrir caminos, que lleven a la complementación de las acciones y planes ya existentes. Asimismo, todo lo que los tiempos presentes y futuros exigen, ya que la vida misma representa una dinámica cambiante y exigente, porque de otra manera la misión quedaría incompleta, especialmente para un país como el nuestro, dotado de riquezas que ameritan el desarrollo de ciencia y tecnología. La educación de las nuevas generaciones requiere la adaptación al avance de los tiempos. Tal desarrollo se reflejará en el bienestar del pueblo todo, para lograr el sueño de Bolívar, de la mayor suma de felicidad y bienestar posible. Para eso es que el pueblo soberano, depositario del poder constituyente, ejercerá su derecho, que aunque voluntario, es un deber moral ineludible e inexcusable.

La abstención sería una agresión contra el ideal que se persigue. Vota y de esa manera acreditas tu derecho a ser venezolano. Debemos demostrar que somos un pueblo de libertadores, que no permitimos a nadie extraño que se meta en nuestros asuntos. Ya basta de acciones violentas, no podemos seguir derramando sangre y destruyendo al país. Cada muerte, cada golpe, cada humillación, será vengada con votos. Nuestra soberanía e independencia debe ser reafirmada, frente a las pretensiones del imperio a someternos de nuevo.

La Constituyente va, por la paz y por nuestra soberanía e independencia.




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