Los miembros de la Armada Bolivariana se sintieron honrados de ser invitados especiales de esta misa. / Foto: SOPHIA HERNÁNDEZ

8 Sep, 2017 | La Armada Bolivariana celebró una misa en honor a su patrona, la Virgen del Valle, a bordo del Patrullero Oceánico de Vigilancia “Kariña” PC-24, donde monseñor Benito Méndez Bracamonte, obispo castrense de Venezuela, ofició la homilía donde reseñó la importancia de la Virgencita Marinera para los margariteños y los marinos.

El almirante Edglis Herrera Balza, comandante general de la Armada Bolivariana, estuvo presente en el acto y manifestó que están de fiesta “con esperanza, fe y devoción para conseguir la paz que tanto necesitamos los venezolanos pues somos un pueblo de amor”.

“A la Patrona de la Armada Bolivariana y de los pescadores le pedimos las bendiciones para el pueblo humilde, esperanzado, que espera la paz, esa armonía tan ansiada que llegó como un milagro luego de la Asamblea Nacional Constituyente. Nos quieren imponer una crisis ficticia y gracias al liderazgo de nuestro Comandante en Jefe y presidente de la República, Nicolás Maduro, eso no ha sido posible, y por el contrario, está reinando en todo el territorio la tranquilidad y el equilibrio, ya que somos en realidad un país de esperanza”, dijo el almirante Herrera.

Por su parte, Benito Méndez Bracamonte, obispo castrense de Venezuela, dijo sentirse emocionado por la celebración de la eucaristía de la Virgen del Valle a bordo de este buque. “Ella es la Patrona de la Armada Bolivariana. Los hombres y mujeres de la Armada Bolivariana le rinden honor, tributo, le manifiestan toda su fe, su honor y su confianza a aquella que es la madre del hijo de Dios, pero es la madre de todos y cada uno de nosotros”.

Encomendó durante la homilía la paz y la fraternidad entre los venezolanos, así como también pidió por los enfermos y aquellos que ya partieron a la casa de Dios en el reino celestial.

“María se hace presente en el país como una más entre nosotros, por medio de las diferentes advocaciones: Coromoto, Del Valle, La Chinita y La Pastora. A ella le confiamos nuestro trabajo diario, proyectos de vida, de estudios, y todo lo colocamos en la Virgen para la navegación de nuestra existencia. Jamás se ha escuchado decir que ella no escucha, siempre atiende a quienes la buscan con fe”.

En la actividad estuvo presente el secretario de Gobierno de Nueva Esparta, Juan José Millán Marín, quien asistió en representación del gobernador Carlos Mata Figueroa, que no pudo asistir a la misa por cumplir con otros compromisos.

Al finalizar la eucaristía, un grupo de funcionarios de la Armada Bolivariana hicieron una ofrenda floral al santuario submarino de la Virgen del Valle ubicado a 20 metros del Morro Blanco y a ocho metros de profundidad.