El joven margariteño Sebastián González, aun cuando integró inicialmente el Sistema Nacional de Orquestas, dando sus primeros pasos con la viola, al final se "casó" con otro instrumento de cuerda también mágico: la guitarra. / Foto: YULIANNYS GONZÁLEZ | @Yuliaseret

23 Feb, 2018 | Cuando toca la guitarra, Sebastián González logra transportarse, irradia buena energía desde su ser interior y embelesa a quienes le escuchan. Es como si al arropar la guitarra con su cuerpo delgado y juvenil, el movimiento de sus dedos fluyera sin impedimento hasta hacer los armónicos acordes de musicalidad sin límites. Esta tarde, superando los nervios iniciales, enfrentará su primer concierto en solitario en el Centro de Artes "Omar Carreño" de La Asunción.

Con entrada libre al público y bajo la dirección de su profesor y mentor Juan Ortiz, Sebastián González aspira entrar en sintonía con la audiencia y también ser didáctico, porque intercalará la ejecución de los temas del repertorio con las explicaciones de rigor, de modo que la actividad resulte pedagógica.

Mientras muchos adolescentes de su edad solo interconectan a través de las redes sociales, chatean y se elevan por esa vía, Sebastián González, sin subestimar lo atractivo del ciberespacio, explora otros horizontes y entrelaza con el campo musical inspirado en su talento innato.

A los 14 años sueña con llegar a ser un gran profesional en el área musical y de allí que sus padres han decidido apoyarle. No le presta atención a las burlas esporádicas de adolescentes que no asimilan que alguien de su edad se dedique a la música.

"Cuando uno toca la guitarra se transporta, se encierra y asimila lo que vas escuchando. Disfruto mucho ese momento", dice y sonríe, al tratar de explicar sensaciones que resultan, en realidad, indescriptibles.

Estudioso

Aun cuando Sebastián González integró inicialmente el Sistema Nacional de Orquestas, dando sus primeros pasos con la viola, al final se "casó" con otro instrumento de cuerda también mágico: la guitarra. Desde entonces la estudia y accede al conocimiento de sus técnicas, en aprendizaje continuo.

Este joven se insertó más en la música cuando su padre, quien tocaba guitarra y hasta tenía un grupo de rock and roll, lo fue enrolando en ese campo.

Confiesa, sin embargo, que al final no le atrajo ese género, sino que se fue hacia lo más clásico y tradicional, tras recibir lecciones de la profesora Natalia Hipólito, y más adelante bajo la guía del maestro Juan Ortiz, también destacado guitarrista, de quien ha aprendido mucho.

Lo considera un maestro muy valioso, porque no solo le ha ayudado en el manejo de las técnicas, sino que además le orienta para poder manejar el miedo escénico y tener seguridad en sí mismo, sobre todo cuando se asume el reto de ser concertista a esa temprana edad.

"Comencé a recibir clases con él cuando me inscribieron en Otilca (Escuela de Música Luisa Cáceres de Arismendi). El maestro Ortiz me ha ayudado mucho, sobre todo para pulir las piezas y dominar las técnicas. Es muy correcto y exigente", afirma.

Sebastián es el segundo de tres hermanos. Cristina, la mayor, canta muy bien y Jorge Alejandro, el menor, toca la batería. Son una familia unida y amante de la música, como un eje que rige su vida con armonía.

En abril próximo el joven margariteño Sebastián González viajará a Valencia, estado Carabobo, para un intercambio cultural y encuentro con otro guitarrista prodigioso de su edad, Alejandro Tapia, quien es alumno del maestro Leonardo Lozano, según explicó el profesor Juan Ortiz.

Tapia vendrá a la isla de Margarita como parte de ese mismo intercambio, de manera que ambos guitarristas, con el ímpetu de juventud y prodigiosas aptitudes, se monten juntos en el escenario y den el esperado concierto.