Efecto Brexit. / Foto: CORTESÍA

11 Feb, 2019 | La economía del Reino Unido creció el 1,4% en 2018, cuatro décimas menos que el año pasado y su nivel más bajo desde 2012, según la estadística publicada este lunes por la oficina de estadística nacional (ONS).

La caída de la inversión, de la producción y de la construcción lastran el dato, que llega a un mes de un posible Brexit desordenado, ante la falta de acuerdo con las autoridades comunitarias para su salida de la Unión Europea, informa lavanguardia.com.

Tras repuntar en verano, la economía se ha ralentizado en el final del año, con un crecimiento trimestral del 0,2%, tres veces menos que el trimestre anterior. De esta manera, la economía se va enfriando conforme se acerca la fecha del 29 de marzo, cuando se consume el Brexit. De hecho, se contrajo un 0,4% si se mira solo a diciembre, siendo la mayor caída en más de dos años.

La incertidumbre marca el rumbo empresarial y ha congelado la inversión, que lleva ya cuatro trimestres a la baja, algo que no se veía desde la Gran Recesión. “El PIB se desaceleró en los últimos tres meses del año debido a que la fabricación de automóviles y productos de acero experimentó fuertes caídas y la construcción también está cayendo”, dijo Rob Kent-Smith, de la agencia de estadísticas británica.

Tampoco ayuda el panorama comercial internacional, con la guerra comercial entre China y Estados Unidos, una desaceleración en el conjunto europeo y una apatía general en los intercambios impiden un mejor desempeño. El único dato positivo es el del consumo de los hogares, que se mantuvo fuerte y creció el 1,9% respecto al año anterior, pero que en el último trimestre se ralentiza hasta el 0,4%.

Desde el Banco de Inglaterra se advirtió la semana pasada que la economía no está preparada para un Brexit sin acuerdo. Mark Carney, gobernador de la entidad, apuntó a una volatilidad a corto plazo y crecientes tensiones en la economía , sobre todo entre las empresas.