Rock Fit entrena tu cuerpo donde sea y sin ningún tipo de excusas. / Foto: CORTESÍA

8 Mar, 2020 | Las capacidades corporales para el ejercicio son ilimitadas cuando existe la motivación para hacerlo. Inscribirse en el gimnasio, asistir a una clase de spinning, entre otros, son métodos tradicionales que tienen tendencia a la monotonía o a la deserción temprana si no hay energía suficiente.

Actualmente, las disciplinas al aire libre donde se experimenta con el cuerpo, utilizando las áreas naturales y algunos implementos construidos por el hombre que rodean el espacio físico, facilitan la inclusión del ejercicio en la cotidianidad. “Las excusas son inoportunas, puedes hacer miles de cosas con tu propio cuerpo. Hacer miles de ejercicios usando tus patrones de movimiento”, nos cuenta María de los Ángeles Tortosa Donado, instructora personal que reconoce le gusta ejercitarse “como una bestia”.

Vinculada siempre al deporte, María de Los Ángeles dejó Valencia y la carrera de odontología para vivir de sus sueños, por eso, arribó a Margarita y se certificó como Trainner 360 y nutrición. “No hay cosa que no puedas lograr con la ayuda de Dios, hay que estar enfocado sin importar lo que la gente pensará”, sugiere. Cerca del mar y las bondades que da alimentarse con la inmensa cantidad de frutos que provee el océano, esta instructora comenzó dirigiendo sus clases en un muelle, el de Pampatar, donde rápidamente logró un buen quórum de practicantes.

María es conocida en redes sociales por su marca personal Rock Fit, compendio donde concurre su trabajo, pasatiempo, empresa, marca, “su todo”, el cual describe como: Rutinas de ejercicios callejeros sin dejar atrás algunas sesiones en el gym. Cargar botellones, remolcar carros, lanzarse al mar y cualquier actividad que permita ejercitarse puede ser incluida en el cronograma. “Siempre hay algo nuevo que hacer para romper barreras físicas y mentales que hagan a cada persona independiente”.

Una receta para desear entrenar tiene que ver con la pasión. Cada mañana María de Los Ángeles sabe que es un día nuevo para volver a empezar y agregar nuevas cosas que permitan explorar técnicas haciendo que funcione. “No necesitas ir al gimnasio para pensar que vas a estar más o menos fit que otros. En realidad es cuestión de ímpetu, ganas de querer hacer las cosas”, explica dando a entender que los obstáculos tanto mentales como físicos son superables.

Con Rock Fit puedes entrenar en línea o presencial con sesiones planificadas para cada día y cada usuario; sin posibilidad de excusarse por trabajo, falta de tiempo y cuidado de hijos porque existen sesiones de 45 minutos o más cortas pero intensas.

Quienes están a distancia reciben rutinas frescas cada día. “Yo grabo diariamente y envío el material un día antes, también envío instrucciones extras y dietas a quienes lo requieren”, explica la creadora de Rock fit, quien supervisa la evolución de cada cliente. “El ejercicio no miente, es como las matemáticas”.

El objetivo de entrenar no es solo verse bien, un abdomen o unos brazos. “Debes ser capaz de ir a comprar un botellón de agua y meterlo en el carro, se dañó el ascensor y son varios pisos, bueno dale; es ser funcional, desarrollar capacidades ocultas detrás de la flojera”, explica.

Sin prisa pero sin pausa
Si bien las redes sociales la han ayudado a proyectarse, no le parece suficiente para tener éxito. “Si no existiesen las redes estaría en cualquier plaza dando clases, al final no es ser famoso, es contagiar a la gente buenas cosas, influir en sus vidas para que logren cosas que quizás creen no pueden hacer”.

Reconoce María que tiene muchas personas que la apoyan y confían en su trabajo. “Me dan aliento y aseguran que tengo que seguir. Viene la marca de ropa, un gimnasio, un laboratorio Rock Fit, no a todas las personas les gusta entrenar bajo el sol o en la calle”.

Montar patineta, surfear y fútbol, entre otros, son actividades que María de Los Ángeles disfruta y puede incluir en las rutinas de ser necesario. Patinar en descenso o en Skate Park y jugar ultimate son sus preferencias. “Ultimate en la playa me encanta, debes no solo lanzar el frisbee, sino hacerlo con respeto y cuidado, sin pegarle a alguien.