Soleymi Caraballo retoma los entrenamientos dispuesta a volver a la selección nacional. / CORTESÍA

5 Jul, 2020 | La luchadora margariteña Soleymi Caraballo regresó a los entrenamientos luego de un año de ausencia para tener a su segundo hijo, esta vez una niña que lleva por nombre Zoe, y que junto a Thiago, el primogénito, son parte fundamental en su vida.

A los tres meses después de la cesárea comenzó a trotar y su buena recuperación resultado de una excelente condición física son un estímulo para continuar, pensando en aprovechar todas las oportunidades que se presenten.

Mientras su esposo, el también luchador e integrante del equipo nacional Luis Avendaño se pone a tono a la espera del llamado a la convocatoria del seleccionado, entrena con él y Jesús Caraballo. “Son buenos compañeros y me motivan mucho”.

Integrante de la selección venezolana en los 68 kilos, con el embarazo dejó de competir interrumpiendo su ciclo olímpico, y pasó a ser segunda en el equipo por eso ahora debe esperar algún chequeo para demostrar las habilidades que la llevaron a representar al país en Suramericanos, Centroamericanos y hasta el Mundial de Hungría en 2018.

“Vamos a ver que sale con respecto al ciclo, no estoy segura de poder terminarlo porque no depende de mi sino de cualquier oportunidad que pueda salir, algún evento nacional y como chequeo, sino esperaría el ciclo París. Con Tokio no sabemos, el mundo está paralizado y no sabemos si pueda surgir alguna oportunidad”, expresa al concluir su rutina en el gimnasio Francisco Verde Rojas, en La Asunción, municipio Arismendi.

Soleymi Caraballo no pierde las esperanzas de asistir a unas Olimpiadas. A sus 26 años considera que todavía le resta un ciclo olímpico y por eso entrena con mucha disciplina para volver al seleccionado nacional. “Me faltan algunas habilidades que se pierden con el proceso de embarazo pero me siento bien”.

MAMÁ Y ATLETA

Con dos bebés busca la manera de entrenar y no descuidarlos. “Mi familia me apoya, cuento con Luis que siempre me apoya”.

-¿Es difícil compaginar el papel de mamá con la atleta?

-Superdifícil porque ahora son dos. Cuando uno entrena es vital la concentración, pero siempre se buscan las alternativas. A Zoe me la cuida mi hermana cuando estoy entrenando y Thiago me acompaña, mientras hago mi rutina Luis está pendiente del niño. Es agotador pero hay que hacer el esfuerzo.

Confiesa que su vuelta al equipo nacional dependerá en gran medida de su voluntad y deseo de cumplir lo que quiere. “Podría rendirme y decir que voy a ser mamá, pero no, pienso que puedo con las dos cosas”.

VIDA PERSONAL

Soleymi Caraballo y Luis Avendaño están juntos desde hace ocho años. / CORTESÍA

Soleymi Caraballo es del sector El Guayabal en el municipio capital del estado Nueva Esparta. Llegó a la Unidad Educativa de Talento Deportivo (UETD) en La Asunción y siente que la lucha la escogió a ella y no al contrario. “Un entrenador me captó y le fui agarrando amor a esto. El deporte y la lucha te brindan una serie de cosas y se vuelve tu estilo de vida”.

De hecho, allí encontró el amor. En una competencia conoció a Luis Avendaño y llevan ocho años juntos y dos hijos. Ninguno de los dos estaba en el equipo nacional. Ella entró primero, luego Luis quien se ha convertido en su gran aliado y respaldo, primero para atender la convocatoria del seleccionado venezolano, ahora pendiente de sus entrenamientos y el cuidado de los niños.

“Gané un chequeo en los 63 kilos, después vino la selección, bronce suramericano, plata centroamericano, tuve a Thiago y paré. Retome los entrenamientos, entré al equipo nacional y me consolidé hasta el 2018 cuando salí embarazada para tener a Zoe”.

“Todavía tengo oportunidad, quiero y puedo, no tengo limitaciones. Mi familia me apoya muchísimo, mi mamá, mi papá, mis hermanas. Siento que para el ciclo de París vendrán muchas cosas mejores y voy a buscar las oportunidades”, afirma la margariteña decidida en retomar su puesto en la selección de Venezuela.