Los vendedores solicitaron participar en plan de reorganización de la Alcaldía de Mariño. / Foto: VANESSA RANGEL

7 Nov, 2014 | La organización de comerciantes informales del centro de Porlamar rechazaron los planes de reubicarlos a principios del año que viene.

"No nos oponemos a la reorganización pero sí a la reubicación sin que nos den una alternativa para seguir trabajando", dijo Salomón Hernández, vocero del Frente Socialista de Trabajadores de la Economía Popular "Todo Once tiene su Trece".

La reubicación está contemplada en un proyecto de la Alcaldía de Mariño para reorganizar el centro de Porlamar.

El grupo registra 120 vendedores en el centro. Este jueves en la tarde participaron en una asamblea en la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV).

Los vendedores ambulantes rechazaron que les den plazo hasta los primeros días de enero de 2015. "¿Es que acaso vamos a dejar de comer después del 1º de enero? La reubicación es una forma de despido indirecto", dijo Hernández.

El proyecto de reorganización despejaría de comerciantes informales las calles Velásquez, Marcano, Igualdad y San Nicolás. Los vendedores ambulantes serían trasladados a las calles transversales dentro del centro de Porlamar.

Hernández indicó que su derecho al trabajo está protegido por una medida cautelar dictada por el Tribunal Contencioso Administrativo en San Juan, que data de tres años atrás.

Los buhoneros se oponen a que los muden a calles transversales, amparándose en que la medida cautelar señala que deben ser reubicados en espacios apropiados.

El grupo también acordó solicitar créditos a entes regionales para mejorar sus condiciones de trabajo.

Inseguridad

El grupo solicitó ser incluido en las reuniones de los organismos de seguridad y rechaza que quieran responsabilizarlos por la inseguridad en el centro.

"Los planes de seguridad han aumentado la represión y acoso de la Policía de Mariño con los trabajadores informales", dijo Selwyn Langaigne.

Desperdicios

Sobre la acumulación de basura en el centro, los buhoneros apuntaron a la falta de contenedores cerrados para mantener los desperdicios almacenados. En otras medidas sanitarias, informaron que 42 vendedores informales iniciarán un curso de manipulación de alimentos ofrecido por el distrito sanitario.