Los trabajadores exigen condiciones de vida justas. / Foto: Olyana Marcano @olymarcano

23 Ene, 2023 | Los gremios sindicales en el estado Nueva Esparta protagonizaron una gran marcha en el centro de Porlamar. Los manifestantes que exigen un mejor salario y el respeto a la contratación colectiva se unieron a la convocatoria nacional.

Estos marcharon desde el Hospital Luis Ortega, plaza Bolívar y de regreso, generando una gran marcha que inundó las calles del centro de la ciudad marinera.

El presidente de Fetraesparta, Luis Castro indicó que está lucha no solo busca un salario digno, sino también condiciones de vida justas.

"No podemos hablar de calidad educativa cuando los maestros y los alumnos no tienen qué comer. Las escuelas no tienen agua o luz. También estamos por los jubilados y pensionados que cobran 6,50$ al mes".

Asimismo, hizo un llamado a los jóvenes a unirse a la lucha, ya que ellos tienen el futuro comprometido.

Durante el recorrido varios maestros, obreros, y personal de sanitario expresaron su descontento con la situación que viven actualmente.

El presidente del Colegio de Médicos, José Narváez resaltó que el gremio de la salud percibe un salario de hambre y trabaja en hospitales que están en pésimas condiciones.

"Hoy hace 60 años el pueblo se levantó contra una tiranía que los mantenía sin libertades públicas. Vamos a luchar por un país donde se vuelvan a respetar los salarios y la vida digna".

La gran marcha en Nueva Esparta estuvo nutrida de personas de todos los municipios de la región Insular.

La secretaria general del Sindicato de la Udone, Lisbeth Patiño lamentó que el oficialismo marche en contra de las sanciones.

"Ellos dicen que no hay negociación salarial porque no hay recursos. No hay recursos para nosotros. Nos preguntamos es bloqueo económico o saqueo a la nación. Acá llueven camionetas de alta gama para los enchufados, altos jerarcas y sus hijos, ellos si merecen una vida de lujos, mientras nosotros pasamos hambre".

Los trabajadores activos, jubilados y pensionados seguirán las actividades de calle hasta que no tengan un salario justo y se acate la contratación colectiva.