26 Ene, 2023 | La semana pasada recordé en este espacio con el título “La Restauración de la IV República”, entre los acontecimientos que precedieron al 23 de enero del 2019, dos audios que circularon por esos días en las redes sociales, los cuales transcribí denunciando que la “autoproclamación” de Juan Guaidó, no era más que una intentona de golpe de estado que bajo la modalidad de “gobierno paralelo”, soportado sobre tres ideas fallidas en el tiempo: “cese a la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres”, pretendió derrocar el gobierno constitucional del presidente, Nicolás Maduro Moros.

La semana pasada les mostré el razonamiento del ex magistrado de la antigua Corte Suprema de Justicia, Román Duque Corredor, quien claramente reconoció que: “La situación que está planteada en Venezuela no tiene previsión constitucional de ningún tipo. Solamente interpretaciones de las normas constitucionales producidas por las circunstancias de hecho, son las que permiten darle una cierta sustentación, pero la realidad es que no existe frente a lo que está planteado en Venezuela una previsión clara establecida en la constitución ni unas normas que deban cumplirse, mucho menos el 233 que no prevé una situación como esa”.

Hoy les traigo la transcripción del segundo audio al que me referí, el del ex diputado al extinto Congreso de la República, Gustavo Tarre Briceño, quien justifica la “autoproclamación” del señor Guaidó y la atribuye al desenlace inevitable de una conspiración puesta en marcha por el antichavismo criollo con el respaldo de los gobiernos de algunos países de la comunidad internacional.

Dijo Tarre Briceño por esos días de enero del 2019: “Todo lo que está sucediendo es una estrategia montada por los líderes de los partidos políticos con un grupo de asesores en todas las materias que hay que tener, entre los cuales, gracias a Dios, estoy yo metido así sea con una uña, por eso tengo bastante información y puedo darla y es una estrategia trazada además con el visto bueno de la comunidad internacional, por eso están sucediendo las cosas como suceden. No es como dicen la mayoría de los ‘twitteros’ rebeldes, ni de los ‘maricorinistas’, ni de los rebeldes sin causa, de que todo ha sido improvisado y de que todo está pasando sin saber que va a pasar. Esto es una cosa que va de la mano de una estrategia y ha sido bien pensado por lo menos todo el año pasado. Bien, bien, bien montada. La única rueda de la carreta que se había salido, primero María Corina, cuando se separa de la unidad, de la MUD, de lo que era la MUD en su momento, tratando de desarticularla para quedar ella de líder y no pudo durante todo el año y segundo, que fue muy importante, muy dañino, que después de que en febrero se había decidido no participar, los partidos serios y por supuesto la MUD, en la elección del 20 de abril y por eso el gobierno la cambia para el 20 de mayo, porque no había candidato de oposición y si no hubiera habido candidato de ningún tipo el gobierno no hace las elecciones, pero eso nos atrasó mucho todo lo que teníamos planeado, apareció el gran divisor que fue Henry Falcón, Bertucci no cuenta, el otro loco no cuenta, pero Falcón si, Falcón se consideraba un opositor y le dio algo de legitimidad a la elección del 20 de mayo, la corrió, aunque sabía que iba a perder y todo lo que iba a pasar, lo sabía de antemano y pasó y después no supo que hacer, bueno, eso desarticuló un poquito lo que se habían hecho de estrategia, sino hubiera funcionado mejor, hoy estaría muchísimo, muchísimo más débil el gobierno si los ‘falconistas’ y Henry Falcón, no cometen el error de ir a competir con el gobierno en las condiciones que se compitió. Y se había decidido por mayoría, solamente Falcón, Copei y el MAS y ese chiripero pequeño que apoyó a Falcón, fueron los que decidieron ir a las elecciones, unos porque estaban infiltradas las directivas por el gobierno y Falcón por ambicioso, porque él pensó que todo el mundo iba a salir a votar y por supuesto sabemos los resultados. Pero vuelvo y repito como dije al principio, es una estrategia con pro y contras, con errores, con aciertos que ha traído a la oposición al puesto de hoy, al lugar donde está hoy, para tener arrinconado al gobierno. Y finalmente les repito, por algo están los cuatro ministros pesados, que son peso pesados, Adán Chávez en Cuba, Villegas en México, Jorge Rodríguez en China, Jorge Rodríguez, imagínense, Jorge Rodríguez fuera de Venezuela, en China y Vielma Mora que es un gran negociador y le tiene la plata a todo el mundo, en Moscú, en Rusia, ¿por qué?, porque están abonando el terreno pa’ la carrera, pa’ lo que llaman siempre los presidentes cuando huyen desde que Truman compró el primer avión presidencial y se le llamó la vaca sagrada, perdón, Truman no, Truman fue el que lo usó más, Teodoro Roosevelt, lo usó y le pusieron la Vaca Sagrada, cada vez que un presidente de un país tercermundista o bananero como el nuestro huye, se le dice que voló en la Vaca Sagrada y por eso se refería siempre la Vaca Sagrada al avión presidencial donde huyó Pérez Jiménez para Dominicana. Ahora sí, buenas noches”.

Con una sobredosis de cinismo y de desprecio por el resto de la oposición, el personaje de marras reconoce que nada de lo que sucedió con el desconocimiento del presidente Nicolás Maduro y la actuación de la Asamblea Nacional, proclamando a Juan Guaidó, fue casual, confirma que fue parte de una estrategia “bien montada” y que todo lo que afirmó en el audio fue cierto porque tuvo una “uña” metida en el complot. Por si las dudas, reafirmó que todo tuvo el consentimiento de la comunidad internacional. Se deslinda de María Corina Machado, para quien trabajó como asesor, señalando que no pudo convertirse en la “líder” de la oposición. A Henry Falcón lo acusa de divisionista. De Bertucci dice que no cuenta y de Reinaldo Quijada a quien identifica como el “otro”, señala que es un loco. De los partidos políticos que apoyaron a Falcón dice que son un “chiripero” infiltrado por el gobierno y para rematar afirma que Venezuela es una república bananera.

Definitivamente, la actuación de la Asamblea Nacional del 2015 que proclamó a Juan Guaidó, amparada en un “chimbo” instrumento jurídico como lo reconoce Duque Corredor, denominado “estatuto para la transición”, no fue más que el “mascarón de proa” de un golpe de estado que comenzó su desarrollo por lo menos un año antes del 23 de 2019, como lo reconoce Tarre Briceño, quien por cierto fue premiado con la “embajada de Venezuela” ante la Organización de Estados Americanos (OEA), corporación multinacional de países de la cual había salido mucho antes Venezuela, por una decisión del gobierno legítimo de Nicolás Maduro.

Pero bueno, le sirvió a Tarre para vivir cuatro años en Washington, cobrando un extraordinario salario en dólares, con todos los beneficios de vacaciones con su respectivo bono, aguinaldos a fin de año, viáticos y pasajes, además de todos los “beneficios adicionales por servir de comparsa al señor Luis Almagro.

La verdad es que el único golpe de estado en el que la oposición venezolana ha tenido éxito en más de 20 años, fue en el que le propinaron al “gobierno ficticio” de Juan Guaidó, el pasado 5 de enero.