18 Feb, 2023 | Los vientos alisios de esta estación del año comienzan a tomar fuerza, indican que se acerca la cuaresma y con ello la imposición de las cenizas en las frentes de la feligresía católica iniciándose así, el recogimiento inmediato luego del desenfreno carnal, todo esto antes del aludido miércoles de ceniza. Asi el calendario festivo mundial marca la llegada de las celebraciones paganas llenas de divertimento: remotas festividades en honor a Baco, el dios del vino, las saturnales y las lupercales romanas, o las que se realizaban en honor al buey Apis en Egipto o las celebraciones en Grecia al dios Momo.

Rememorando a estas fiestas en nuestro entorno porlamarino cruzgrandero, en la década de los años 30 y 40, vale mencionar el juego con los llamados “cascarones” y “cartuchos”, artilugios fabricados artesanalmente por la “tía Bonifacia Facha Fermín”. El primero consistían en cascaras de huevos enteras que contenían agua perfumada y coloreada, las cuales eran lanzadas contra la humanidad de las personas. Los “cartuchos” eran envoltorios pequeños de papel que contenían polvo de almidón coloreado con añilina y se jugaba lanzando el polvo coloreado encima de la gente.

Las comunidades de Porlamar, entrado la década de los sesenta con el boom del turismo comenzaron a coquetear con las fiestas carnestolendas de manera más organizada, es así que en el sector de la Cruz Grande recordamos sendos temples con elección de sus reinas. Rememoramos los de 1967 cuando fue electa como soberana Rusadil González Fermín (Rusadil I), en 1968 Beatriz Mercedes Fernández Fermín (Beatriz I) y Crucela Velásquez (Crucela I). Con la llegada de los 70 las festividades decaen un poco y es el carnaval con agua, hollín y otras sustancias el que marca la pauta. No obstante el sentimiento festivo de su gente afloro para mediados de esa década realizándose fiestas en el callejón de la familia Ramos, el cual cerraban en la noche convirtiéndose en “La cueva del dragón”, así como la elección de Lenis Aurora Vásquez (Lenis I) como soberana del año 1981. A mediados de los años 80 a nivel municipal, aparece la Fundación del Carnaval de Mariño (Funcamar), la cual le da un duro repunte a los carnavales en Porlamar, esta Fundación en el año 1991 fue sustituida por la Asociación del Carnaval de Margarita (Asocamar). No obstante la Cruz Grande no tiene una presencia contundente en esas celebraciones, limitándose a realizarse fiestas comunitarias, sin candidatas de trascendencia al certamen del municipio. Las celebraciones carnestolendas de los ´80 y ´90 se caracterizaron por los reinados infantiles localmente, desfiles de carnaval escolar y algún muy modesto templete de coronación, generalmente de niñas.

Hasta el presente no había impactado alguna representante Cruzgrandense como candidata al reinado de los carnavales del municipio Mariño y su capital Porlamar, este año 2023, surge la esbelta, inteligente y elegante señorita, Camila Alessandra Jaramillo González, estudiante de arquitectura con dieciocho años de edad de estirpe Guaiquerí, quien mereció ser electa en días pasados como la soberana de estos carnavales organizados por la Alcaldía de Mariño. Esta simpática y carismática joven, viene de una dinastía de reinas de carnaval que impactaron por su belleza hace unas cuantas lunas en Porlamar. Por el lado materno de los González Fermín está emparentada con Rusadil I, quien es su tía abuela, además con Beatriz I, quien es su prima sexta y paisana de Crúcela I, mujeres éstas que enaltecieron nuestro gentilicio en aquellos carnavales de siempre.