No obstante, casi tres años después es cuando presenta a sus seguidores Te lo suplikito y Lloré, cargadas con letras, ritmos y videoclips –mucho más explícitos y atrevidos que los acostumbrados- y que, según sus palabras, identifican un lado no mostrado antes por el cantante y compositor, criado en la calle nueve de El Valle, pero que hoy escribe y produce para luminarias del canto como Will Smith, Marc Anthony, Jennifer López, Thalía, Bad Bunny y Natti Natasha, entre otras.

Los dos temas formarán parte del disco ICHI -que significa uno en japonés- y que será lanzado a finales de 2023.

- ¿Por qué el uso del diminutivo en el título de Te lo suplikito?
- El título de Te lo suplikito nació de unos combates que yo me lanzaba con Arepa, mi perrita. Por lo menos una vez a la semana me lanzo un combate con ella de jugueteo y pelea y un día posteé una historia de Arepa comiéndome la cara y diciéndole: “Ay, no, por favor, no me mates, te lo suplikito”. Algunos compositores queremos seguir el ejemplo de los humoristas como “El conde del Guácharo”, ¿Qué hace él? ¿Qué hacen ellos? Estudian la calle, hacen del día a día un chiste, igual nosotros los que escribimos. Cuando dije lo del “Te lo suplikito”, las chamas en las redes, en la calle dijeron: ¡Ay, qué bello!, ¡Qué tierno!, ¡Qué rico se escucha eso de lo de 'Te lo suplikito'! y entonces dije: “Hay que hacer musiquita para eso”.

- Tras 23 años de trayectoria, ¿Qué significa para Yakozuki el lanzamiento de ICHI?
- El disco es 100% yo. Yakozuki como tal es la esencia de Óscar desde cuando tenía 14, 15 años, soñador, rebelde, usando los accesorios correspondientes. Perdí mucho eso, no sé por qué, uno va como agarrándole miedo a la vida, ya no te lanzas de culito, ya no montas en bicicleta, ya no haces caballito en la moto. Yakozuki rescata al Oscarcito de A.5; también al Oscarcito de Lsquadron; al compositor; al Óscar Hernández que completó a otros artistas; entonces, lo interesante de Yakozuki no es que estoy mostrando una nueva faceta, puede ser raro para la gente, simplemente estoy mostrando una cara que la gente no conocía, mi lado sucio, sucito que tengo. Yo puedo hablar muy lindo, puedo ser romántico, pero también hablo sucio porque es necesario, puedo decir Lechería, pero también puedo ir para el barrio La liga también. Como soy de El Valle, yo digo que el mejor sexo se tiene en el barrio porque tú estás ahí bajo un techo de zinc, llueve, te cae una gota en la frente, tienes una botella de anís al lado del colchón y escuchas a Tito Rojas. Ahí no hay botellita de champaña, ahí no hay cobijita, ahí se tiene el sexo verdadero, ahí hay autenticidad. Ahí no hay Casa Bote. Ése es Yakozuki, la gente no conoce ese lado de mí y creo que es hora de demostrárselo, de decirle a las personas: Éste soy yo. Soy salsero, soy tuki, me gusta el reguetón, la calle y lo estamos reflejando, de hecho, ha sido un arma de conquista durante muchísimos años. Mi exesposa era bien sifrina. Los primeros perros calientes que se comió en Plaza Venezuela, ¿Con quién fue? Con papito. La primera vez que se montó en la estación del Metro Chacaíto, ¿Con quién fue? Con papito. Eso es lo que estamos mostrando, simpatía, sinceridad, transparencia, sin tabúes, sin mitos raros de la música. Hay música para todo el mundo. Yo puedo hacer el reguetón más romántico o la balada más sucia.

- En la línea de lo que puede hacer en sus temas, ¿Escuchó Mejor que yo, de Anuel AA? ¿Qué le parece?
- Anuel AA me gusta muchísimo porque tal vez no vibro con esos atrevimientos, pero se los respeto. No creo que me meta en esas aguas, pero el tipo es un duro, no es el mejor cantante para muchos, pero considero que tiene una voz que se distingue, y eso para mí es vital, igual que Bad Bunny, igual que muchos y ahora, con esa canción que le dedicó a Karol G: “Alguien diría, ¡Qué tipo tan romántico porque le está dedicando frente al mundo entero un ‘te extraño, mamita’! Y eso es valioso. Y eso se lo aplaudo.

- Cuando se pegan tantos hits para Víctor Manuelle, Marc Anthony, Jennifer López, Thalía y Natti Natasha, entre otros intérpretes, ¿No cae en la trampa de la presión? ¿Cómo definiría el momento profesional que está viviendo?
- Divertidísimo, sin límites. Estamos en la era de los filtros que no quiero usar. Estoy vibrando en una bonita onda, con energía de hacer canciones y pasarla bien. Ya no quiero hacer canciones para tratar de agradar a la moral.

- ¿Cuándo vuelve a Venezuela?
- Quiero volver pronto. Ojalá sea este año. Me han llamado muchísimo para hacer espectáculos allá, en los lugares soñados. Obviamente, quiero ir, pero más allá que hacer música, quiero ir a abrazar a los panas, a los familiares, ir al Ávila, extraño comerme un perrocaliente o un patacón en el Zulia o una fosforera en El mosquero. Yo vivía en la calle nueve de El Valle , ahí había un autolavado, lo volaron y pusieron la nueva estación del metro. Quiero montarme en ese metro, vibrarme esa energía que hay ahí.

- ¿Dónde está el dije de los patines?
- Ése es el que la gente confunde, que creen que tiene alguna razón. Ella (Natasha Araos, exesposa de Chyno Miranda) y yo somos panas, pero que no se me resbale porque le rasguño la espalda. Yo estoy tranquilito. La amo, la adoro, es mi pana, pero si se me resbala me le como esos abdominales súper ricos.