El 19 de abril de 1810 no ocurrió nada importante en la Isla de Margarita. Sin embargo...
20 Abr, 2025 |En verdad, el 19 de Abril de 1810 en Margarita no ocurrió nada extraordinario, debido a que el foco de la insurrección contra el dominio colonial español en aquellos momentos se centró en Caracas, ciudad capital de la Capitanía General de Venezuela y, posteriormente, de manera progresiva, se proyectó al resto de su territorio.
Para nosotros, la nota excepcional y característica de este suceso histórico trascendental lo protagonizó el conocido y apreciado comerciante de cabotaje pampatarense Manuel Plácido Maneiro, quien, debido a gestiones propias de su oficio, casualmente, fue testigo presencial de aquel hecho político que condujo a la deposición del Capitán General Vicente Emparan y al nombramiento de una Junta Patriótica. Todas estas circunstancias imprevistas se juntaron para que fuera designado portador de esta noticia a la Provincia de Margarita y lograr el apoyo correspondiente.
La aceptación de tan delicadas y riesgosas responsabilidades impactó la vida de Maneiro de manera radical y profunda: el agente comercial que había zarpado días antes desde el puerto de Pampatar con destino al puerto de La Guaira retorna a su Isla transformado en líder patriótico, consecuente actitud y comportamiento que mantuvo con absoluta fidelidad hasta el último día de su temprana muerte. Maneiro puede ser considerado entonces, en principio, como el cordón umbilical que estrechó a la Isla de Margarita de manera directa con Caracas.
Desde el primer momento que nuestro personaje pisa tierra margariteña -finales del mes abril- se dedica a divulgar entre los vecinos, amigos, familiares, colegas y demás, la información de los sucesos ocurridos en Caracas y la invitación a sumarse al movimiento insurreccional y aquella campaña informativa fue tan efectiva que, en breves días –el 4 de Mayo- ya los margariteños procedentes de diferentes localidades se concentraron en la ciudad capital de La Asunción y en gesto enérgico y concluyente, de manera similar a lo ocurrido en Caracas, procedieron a destituir al Gobernador Joaquín Puelles y a designar a la Junta Revolucionaria Provincial. Por eso afirmamos con absoluta responsabilidad que el 4 de Mayo es para los margariteños su 19 de Abril.
A partir de entonces, Maneiro inició su meteórica carrera política, siempre consecuente con los principios revolucionarios. De allí que a la hora de atender a la convocatoria para la instalación del Congreso Constituyente al año siguiente -1811- resulta designado único representante por la Provincia de Margarita y, como tal, estampa su firma al pie del texto declaratorio de la independencia. Nuestro pueblo insurgente celebró con alegría que, por su intermedio, la Provincia de Margarita ocupara tan destacado lugar a escala nacional, ratificando, a su vez, su vocación libertaria.
Como se sabe, los años subsiguientes resultaron difíciles a la causa patriótica y las circunstancias comenzaron a exigir mayor dedicación y entrega. Maneiro asumió de manera resuelta su papel de liderazgo y cuando se disponía a coronar la empresa, una desgarradora noticia conmovió a todos: el Mal de Lázaro, lepra, lo contagió de manera absurda e inesperada y aún cuando lo resistió con todas sus fuerzas, se declaró vencido cuando ya estas les resultaron inútiles. Las circunstancias de su muerte y entierro quedaron envueltas en el misterio. Ahora, el mismo pueblo que lo admiró y celebró en tantas ocasiones, debió manifestar su pesar y dolor. Aquello fue, indudablemente, un golpe noble a la causa popular revolucionaria.
No obstante las adversidades, debía mantenerse firme el empeño de alcanzar la liberación nacional. El Libertador Simón Bolívar, ya en Haití, lanzó la propuesta: organizar una expedición libertadora que, con el apoyo del Presidente Alejandro Petión, muy pronto pudo organizarse, con la incorporación de unos trescientos combatientes, y zarpar desde el puerto de Los Cayos de San Luis el 31 de marzo de 1816 con destino a la Isla de Margarita, arribando al puerto de Juangriego el 3 de mayo e instalándose en la Villa de Santa Ana del Norte. Ahora la región insular será el epicentro de la lucha insurreccional de igual manera que en el año 1810 le correspondió ejercerlo a Caracas. La proclamación de la Tercera República en la voz y la pluma de Bolívar así lo confirman mediante proclama fechada el 8 de mayo a objeto de enaltecer los trascendentales acuerdos logrados en la asamblea patriótica del día 6 efectuada en el templo de la Villa histórica: “¡Venezolanos!: He aquí el tercer período de la República… La inmortal isla de Margarita, acaudillada por el intrépido General Arismendi, ha proclamado de nuevo el Gobierno independiente de Venezuela y le ha sostenido con un valor sublime, contra todo el imperio español.”
Un viraje radical sufrió el proceso histórico venezolano, ahora por los cauces de la independencia, la libertad, la soberanía y se proyectó al resto de América Latina, logrando su máxima expresión en las batallas de Junín y de Ayacucho, las cuales dieron la libertad al Perú y al Continente Americano.
Cuando leemos acerca de estos temas, los margariteños debemos tener siempre presente estas lecciones de la Historia que nos relacionan con sucesos trascendentales y donde la Isla de Margarita y sus pobladores ejercieron un relevante papel.
Nuevo Chimbote, Perú, 12 de Abril 2025.