Juan José Tosco, gerente de ventas del hotel Ikin, y Luis Martínez, chef principal de La Bodega. / Foto: TANYA MILLÁN
1° Mar, 2015 | La bodega, restaurante del hotel Ikin, ofrece una experiencia gastronómica para satisfacer los paladares más exigentes de turistas y locales.
Además de una atmósfera estupenda para compartir, ofrece un menú abierto, literalmente a la medida del gusto de los comensales. Ellos quedan en las manos del chef Luis Martínez, joven aunque verdadero maestro de la experiencia gastronómica para sorprender a la hora de degustar cualquier especie marina u otro tipo de carnes, dándole un extraordinario toque milenario oriental.
Cada oportunidad es un momento para disfrutar nuevos sabores. Cada plato es una experiencia única e irrepetible cada vez que se sienta a la mesa. Cada bocado estimula el sentido del gusto con diversas y variadas sensaciones, que no son más que la particular huella gustativa de un chef que se atreve a combinar texturas y aromas, brindando un placer gustativo que permanece en la memoria horas después de haberlo degustado.
Es una experiencia mágica a orillas del mar. Única: "Ikin", como decían los taínos en lengua arawak.