Cotorra margariteña. / Foto: ARCHIVO

19 Ago, 2015 | En el marco de celebrarse 25 años del decreto de la cotorra margariteña como ave regional de Nueva Esparta, representantes de la ONG Provita presentaron en un conversatorio realizado en las instalaciones del Ministerio del Poder Popular para Ecosocialismo y Aguas, el balance de resultados del Programa de Conservación de la Cotorra Margariteña (Amazona barbadensis) que ejecutan en la entidad desde el año 1989.

El 13 de agosto de 1990, mediante decreto número 71, el Ejecutivo regional designó el ave regional de Nueva Esparta, razón principal por la cual se realizó la actividad, además de la necesidad de masificar la información, así como consolidar las alianzas que permitan proyectar de manera provechosa el trabajo que desde los diferentes sectores se adelantan para la conservación y protección de las especies de fauna silvestre, en este caso la cotorra margariteña, que tiene alta importancia biológica y cultural para la población neoespartana, según lo expresó Luis Bermúdez, director estadal de la cartera de Ecosocialismo y Aguas.

El encuentro contó con la participación de servidores públicos adscritos a la cartera ecosocialista en la entidad, representantes del Instituto Nacional de Parques (Inparques), Instituto de Recuperación y Mejoramiento Ambiental (Irmane), Fundación Misión Árbol, consejos comunales y del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC).

José Manuel Briceño, de Provita, explicó las diferentes aristas que abarca el proyecto de conservación de la cotorra margariteña, dentro del cual se permite consolidar acciones de protección a otras especies asociadas a los bosque secos y que guardan relación con el objeto principal de estudio del proyecto.

"La cotorra es un indicador importante del bosque seco, además es dispersor de semilla. Para nosotros el programa de manejo y control busca proteger la cotorra como especie bandera, pero además abarca otras especies de fauna importantes para los diversos ecosistemas, como el mapurite, cunaguaro o venado y la vegetación de la zona principalmente quebrahachos, yaque, palo sano, entre otras", mencionó el especialista.

Briceño destacó que durante la temporada del año 2015 contabilizaron un total de 96 pichones volantones, lo que representa el mayor récord histórico del programa, cuyo promedio anual alcanzaba la cifra de 50 ejemplares. Adicionalmente, se cuenta con mayor cantidad de ecoguardianes, presencia policial y militar en las áreas de conservación de la cotorra, con el fin de evitar la cacería furtiva de nidos.

El Programa de manejo y Control de la Cotorra Margariteña que lidera Provita en la entidad, con la aprobación y supervisión del Ministerio de Ecosocialismo y Aguas, incluye zonas como la consolidación de ecoguardianes, reforestación de áreas, protección y reconstrucción de nidos, incorporación de nidos artificiales y la educación para la conservación.