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16 Sep, 2021 | El vandalismo ha destruido a la Unidad Educativa Vicente Marcano en Porlamar. No hay un espacio de este recinto educativo neoespartano que esté en buen estado y es que la delincuencia se ha llevado todo lo que ha podido y su situación es tan dramática que es imposible que los casi 900 alumnos regresen a sus aulas de clase.

El panorama es dantesco de principio a fin. La calle que da a este liceo está llena de huecos y charcos porque se instaló un paral de agua y el paso de los camiones ha destruido la vialidad.

Los pupitres desaparecieron casi por completo de las aulas de clases pues cualquier metal es robado. Han desprendidos las rejas de seguridad, se han llevado las pocetas y lavamanos de los baños, desarman los ventiladores, se robaron el sistema de bombas y las tapas de los tanques. Todo se lo han llevado.

Los baños están destruidos. / mguillen

Además, la maleza se ha apoderado de los espacios de esta escuela. Desde que se inició la pandemia no ha recibido ningún tipo de mantenimiento preventivo.

Solo queda la mitad del techo de la cancha deportiva debido a que las láminas han sido desprendidas. La comunidad relata que quienes se las han llevado no las rompen, sino que las desprenden con sumo cuidado.

Los vecinos de este sector comentan que las calles y avenidas aledañas a esta institución están totalmente oscuras, y la visibilidad al liceo es prácticamente nula, por lo que robar es sencillo para los delincuentes.

Los dolientes hablan

Crismary Flores, vecina y egresada de la institución en 2012, reseñó que desde el inicio de la pandemia las autoridades se desentendieron del Liceo Vicente Marcano y el vandalismo se apoderó de la institución educativa.

“Ya no queda prácticamente nada. Se han llevado las estructuras, sillas, pupitres y todo lo que hay dentro. Necesitamos que alguien se preocupe. Las calles y el liceo están a oscuras. ¿Cómo es posible que colocaran un paral al frente?, eso es un peligro para los estudiantes”.

La maleza sirve para esconder los objetos que han desprendidos. / mguillen

A su juicio, es imposible iniciar las clases en este recinto educativo, porque no hay condiciones mínimas. “No hay agua, no hay luz, no hay pupitres y sillas donde sentarse. No hay baños, no hay pocetas, no hay nada”. Hizo un llamado a las personas de la comunidad a alzar la voz y tomar cartas en el asunto sobre la situación del liceo.

Por su parte, Paola Reyes, quien también es egresada y vecina, dijo que este liceo tiene poco más de 10 años de construido y es lamentable ver el estado deplorable en el que se encuentra. Explicó que la cancha tan solo tiene 5 años de construida y ya prácticamente se llevaron la mitad del techo, no tiene luces, ni arcos y la pintura está desconchada.

“Es doloroso ver esto, y por eso vengo a pesar de que no tengo a familiares estudiando aquí. No podemos permitir que los niños de la comunidad vengan a ver clases aquí”.

Ya han cargado con la mitad de las láminas del techo de la cancha. / mguillen

Han violentado las puertas y ventanas. / Cortesía

Solo queda un tanque en el sistema de bombas. / mguillen