21 Feb, 2024 | Los pescadores y residentes de La Caranta protestaron en rechazo a la construcción del Santuario Waterland, mundo marino, el cual se planea instalar en la zona. Los detractores de este proyecto, que contempla un área de 9mil mts2, con una inversión de 1 millón 600 mil dólares, afirman que el impacto ambiental generaría la muerte de la pesca artesanal en un eje que abarca desde El Tirano hasta La Isleta.

El cronista de Pampatar, Marino Luna, no comprende cómo el Ministerio de Ecosocialismo apoya un proyecto que pone en riesgo a un caladero de más de 200 años.

«Esta zona es un caladero natural de más de 200 años. La constitución y las leyes protegen a los caladeros por encima de cualquier otra consideración. Es un sitio donde los pescadores amarran sus trenes de sardinas, y es un recaladero de sardinas por la importancia que tiene una especie de grupo de corales».

Considera que este espacio, más allá de resguardar especies, seguirá siendo un espacio para mantener a los delfines en cautiverio y como animales de circo.

«Es un proyecto donde se van a seguir manteniendo prisioneros a unos animales que son aliados ya de la inteligencia humana. Entonces hay una especie de crueldad que debe ser conocida por todo el mundo en este sentido. Pero es un negocio».

Por su parte, Andrés Vicente Marcano, pescador artesanal de Pampatar, añadió que al tener presencia de 14 delfines en esta zona, las sardinas desaparecerán.

«Entonces imaginémonos un Waterland con unos delfines que tienen un sonar y con ese sonar ellos capturan y marean a su presa, en este caso las sardinas, calamares, cabañas y paremos de contar, a aquellos señores, que están pensando que esto sería viable para este pueblo y para la isla. Están totalmente equivocados. No es viable para el turismo, menos para el pamptarense y el pescador».

Recordó que las comunidades más necesitadas de Margarita viven de la pesca y no del turismo, como quieren hacer creer.

«Afectaría a todos los treneros, tanto de Pampatar, Moreno, Valdez, Bella Vista, la Isleta y seguiría para Coche. Entonces sería hambre para el pueblo de Pampatar y para toda Nueva Esparta. Quieren hacer parecer de que con este proyecto van a traer turismo. No queremos turismo, no vivimos de turismo. El margariteño vive realmente de la pesca».

A la protesta se presentaron autoridades del Ministerio de Pesca en Margarita, quienes aseguraron elevar la queja a las autoridades nacionales.