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Jóvenes viven el Carnaval como una tradición familiar
En una consulta entre niños y jóvenes en los balnearios de El Yaque y Pampatar, se comprobó que a pesar de las variaciones presentes de una generación a otra, el denominador común para celebrar estos días es la imaginación.
Víctor Orozco

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Los niños viven la fantasía del Carnaval. / Foto: VANESSA RANGEL

17 Feb, 2015 | Desde los primeros años los padres inician a sus hijos dentro de las actividades relacionadas con las festividades de Carnaval. Disfraces y fiestas son solo algunos de los recuerdos de muchos niños, que al ser consultados expresan su alegría de emanar en su memoria algún detalle sobre una vestimenta o comparsa que les causó impresión.

En una consulta entre niños y jóvenes en los balnearios de El Yaque y Pampatar, se comprobó que a pesar de las variaciones presentes de una generación a otra, el denominador común para celebrar estos días es la imaginación.

Para Melany Torres, quien tiene 13 años, el carnaval significaba durante su niñez una época en la que podía vivir la fantasía de vestirse como una brujita y pensar que tenía poderes mágicos, "En esos tiempos me gustaba mucho vestirme de bruja y asistir a las fiesta del colegio".

Ya en sus años de preadolescente solo tiene un significado, ir a la playa. "Ya no me disfrazo, cuando tenemos la oportunidad venimos a la playa a disfrutar, a mí en lo personal me gusta mucho jugar tenis de playa con mi hermano".

La tradición no es celebrada por todos, tal como lo evidencia Eduardo Rodríguez, de 17 años, quien reside en la isla de Margarita y comenta que en su familia el carnaval no es una costumbre que lleven a cabo todos los años. "Para mi familia no es una tradición muy celebrada, algunas veces se viene a la playa, en otras oportunidades se opta por acudir a otros sitios, pero los disfraces no son algo que practiquemos".

Tradición

Para Marilis Borquez, quien fue a la playa en compañía de sus tres sobrinas, el Carnaval es una tradición que debe permanecer viva dentro del núcleo familiar como un elemento positivo que ayuda en la formación e integración sana de los niños dentro de una sociedad.

"Nosotros como familia siempre tratamos de llevar a los más pequeños a lugares en donde ellos puedan disfrutar las festividades, además de la playa se procura llevarles disfrazados a los centros comerciales u otros establecimientos donde ellos puedan compartir con otros niños que también celebran el Carnaval", precisó Borquez.

Borquez, radicada desde hace ocho años en la Isla, comenta que por lo general la celebración viene dada por las costumbres de cada hogar, en su caso tuvo la oportunidad de pequeña de usar disfraz y ver las comparsas, por lo que infiere que debe proporcionarle esas vivencias a sus familiares.

Camila Puche, de tan solo siete años, entiende el Carnaval como una fiesta en la que debes estar disfrazada como parte de los requisitos. "Yo me vine a la playa, pero igual me traje mi disfraz de bruja para colocármelo e ir a los centros comerciales con mi familia; a mis hermanas les gusta mucho vestirse de Pepa la cerdita".

Gustos

Para Johan Torres, universitario de 21 años, el carnaval siempre le trae buenos recuerdos, desde Harry Potter hasta Hércules, todos los febreros representaban la oportunidad de lucir algún atuendo. "Yo me disfrazaba muchísimo, entre los que recuerdo están Harry Potter, Hércules, Toy Story, príncipe y el gato Tom".

Torres comenta que la tradición ha ido perdiendo su significado debido a varios factores, entre estos la falta de interés de algunos padres. "En la actualidad el carnaval se trata básicamente de ir a la playa, cuando yo sea padre mantendré viva la tradición con mis hijos alentándolos a disfrazarse y disfrutar las fiestas".

Anthony Lara, de 14 años, ve el carnaval como algo que vivió en su niñez, pero que ahora es como una oportunidad para disfrutar de las playas que ofrece el estado Nueva Esparta. "Cuando estaba pequeño recuerdo haberme disfrazado de Spiderman, también me gustaba mucho jugar con bombas de agua y correr detrás de las comparsas que lanzaban caramelos a la multitud".

Para adultos y jóvenes, el carnaval representa la ocasión perfecta para reencontrarse con las tradiciones culturales, al tiempo que se refuerzan lazos familiares en un ambiente de festividad y celebración que solo se da una vez al año en todos los rincones del país.

Música

De acuerdo con Marilis Borquez, este año ha habido un rescate del Carnaval, pues a su parecer las emisoras radiales optaron por difundir dentro de su programación piezas musicales acordes con los días de asueto. "Últimamente se escucha bastante música que te hace sentir el carnaval en un entorno mucho más cultural y propio de la Isla, algo más autóctono", refirió la fémina.




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