Los comerciantes encuestados comentaron que los visitantes se asombraban de la desaparición del diferencial de precios que hacía atractivo al Puerto Libre. / Foto: JHONNATAN BENÍTEZ.

16 Sep, 2015 | En la cuadra de bodegones frente al Mercado de Conejero reportan que los altos incrementos de los licores y golosinas importadas hundieron el volumen de ventas esta temporada vacacional.

José Luis Hernández, encargado del bodegón Mafer en Conejeros, afirmó que las vacaciones de medio año fueron decepcionantes en cuanto a ventas.

"La gente se queja de los precios, decían que ya no valía la pena venir a comprar licor en la Isla porque los precios estaban iguales o más caros que en tierra firme", dijo Hernández.

En 40% bajaron las ventas en su establecimiento respecto al período de vacaciones escolares del año pasado, apuntó Hernández.

El despacho de marcas de whisky estuvo por debajo del suministro de años anteriores. "Pedimos 1.000 cajas y nos daban 20 cajas de whisky para todo un mes", dijo Hernández.
Las limitaciones de inventarios obligaron a racionar la cantidad de botellas vendidas por persona, añadió el comerciante.

Los altos de precios de venta del whisky y otros tipos de bebidas y alimentos importados es indicativo del financiamiento de las adquisiciones de estos rubros con divisas al costo del mercado paralelo y no a las tasas oficiales.

Por su parte, Enyth Mata, encargada del Bodegón Celimar, indicó que las ventas bajaron en más del 50% en comparación con 2014. "La temporada estuvo malísima por la escasez de productos".

Desde mediados de julio se agudizó la escasez de cervezas, refrescos, agua mineral y jugos, dijo Mata.

Esta comerciante también confirma que en esta temporada sus proveedores limitaron la cantidad de bebidas importadas despachadas. "Antes no había límites a la cantidad que podían despacharnos, ahora nos mandan tres o cuatro cajitas al mes".

Sin embargo, no todos los comerciantes comparten una evaluación negativa de la temporada. Edgar Granados, de La Casa de la Caña, se mostró satisfecho con el volumen de ventas, aunque notó una sustitución del whisky por rones nacionales. "Claro, ha bajado la categoría, ya la gente no compra tanto whisky como antes por estar tan caro; la gente está comprando más ron", dijo Granados.

Expectativas

La expectativa de los comerciantes de bodegones consultados en Conejeros es que los precios de los licores suban.

José Luis Hernández, encargado de un establecimiento de la zona, refirió que ya su distribuidor le informó que el próximo despacho de rones viene con un 50% de incremento y espera que la subida también se refleje en las bebidas alcohólicas importadas. Añadió que ya algunas empresas empezaron a adquirir las botellas para armar las cestas navideñas en previsión a que en los próximos meses serán inasequibles.