Los cargadores del Santo Sepulcro en La Asunción / Cortesía

18 Abr, 2023 | Cada Semana Santa Asuntina, durante el Viernes Santo, 7 de abril del dos mil veintitrés, nos concentramos en el Palacio Legislativo de La Ciudad, a las 10:30 de la mañana, sale el cortejo fúnebre con el cuerpo de Jesús, desnudo de pensamiento, obediente de las palabras del Padre, murió por nosotros y por nuestros pecados; pero con la esperanza de la resurrección.

Con las flores más vistosas y de mirada a un sol radiante, se mueve al compás del redoblante el Santo Sepulcro, el pueblo se acopla silente, con fe, devoción, respeto; se acercan a él con la visual al cielo haciendo la señal de la cruz, el faldón morado aterciopelado que cubre el mesón es llevado en sus extremos por dos feligreses que en el transcurso del recorrido de cinco horas hasta la Catedral es sustituido por devotos que año a año cumplen promesas de manera generacional, hoy un año más se cumple con la tradición encomendada; se respira un aire de tenue brisa fría que acaricia los rostros y a la vez abraza la ausencia porque el cargador mayor está en la habitación de al lado, Regulo Rafael Rivas Risquez, un cinto negro arropa un costado del mesón, honrándolo por tanto, en su lugar está su heredad, taciturno, melancólico, profundo, con sus pies acompasados y ojos cristalinos que humedecen el alma por su ausencia.

El Santo Sepulcro

Los hombres bajo el mesón de forma sincronizada se acoplan al compás del Popule Meus, pieza insigne del momento, salen y entran del mesón con sus rodillas en sus cabezas, allí estoy observando, sumergida en sus miradas clementes, profundas, semblantes que evocan sentimientos, facciones endurecidas por los años, pliegues de los rostros que se aprietan en sincronía con sus pensamientos, lágrimas que se afloran en conexión con cada ser, sintiendo cada respiración y dando gracias por estar tan cerca, por sentir su aceptación, Cargadores y Palmeros Asuntinos haciendo de la tradición un hecho trascendental para la feligresía.

Alrededor del mesón hoy también está la madre, el padre, el niño y el amigo que perdió a un ser querido y se le adelantó la hora de su funeral para estar allí, con el coraje y el temple que hacen la carga más pesada; pero el fervor y sacrificio hace del feligrés un elemento geomental que da arraigo e identidad en su religiosidad.
El sentido de pertenencia del asuntino en la conmemoración de la Semana Santa durante 419 años según Vásquez de Arce en sus visitas Pastorales, dan sentido al significado de analizar el comportamiento de la población, tomado de la mano de la micro historia de la ciudad de La Asunción, capital del Estado Nueva Esparta.

(Luzmary Garcia, La Asunción 17 de abril de 2023)