Se prevé que para este próximo mes de mayo esté lista la cosecha de ají margariteño en la finca 'Mi Angelito”. / Foto: DANIEL RAMÍREZ

12 Abr, 2016 | Sembrar ají margariteño resulta rentable para el agricultor Rainer Salazar, quien lleva cinco años cultivándolo en los terrenos de su finca “Mi Angelito”, ubicada en la calle Las Delicias de El Espinal, municipio Díaz.

Confesó que creció viendo cómo su padre, Lázaro Salazar, cultivaba con esfuerzo y dedicación este tipo de vegetal, sin llegar a imaginarse que se convertiría en su principal fuente de ingreso económico.

En la actualidad tiene sembradas 4.800 plantas de ají margariteño y otras 5.000 matas en semilleros, que serán trasplantadas en los próximos días.

“Desde las 5:30 de la mañana hasta las 9:30 estamos metidos en el terreno, limpiando y podando matas de ají. A las tres de la tarde, después de descansar, regresamos otra vez a la actividad hasta las cinco de la tarde”, relató Salazar.

Refirió que luego de tanto trabajo siempre obtienen buen resultado de la plantación. Esperan que cuando llegue el tiempo de la cosecha, puedan recoger unos 1.000 kilos semanales.

Cebolla

A igual que el ají, Wilfredo Díaz, hermano de Rainer y también trabajador en la finca, se encarga de un corte de cebollas.

Él detalló que hay 40.000 plantas sembradas en los terrenos, mientras unas 60.000 que se encuentran todavía en semilleros.

Para poder realizar esta primera prueba con el cultivo de cebolla, tuvieron que encargar la semilla fuera de la isla de Margarita, porque “lamentablemente aquí es difícil el acceso” para comprar este producto.

Próximamente

El joven agricultor comentó que entre sus planes está sembrar próximamente especies como tomate perita y manzano, además de melón. Ya ha experimentado con estas especies en los terrenos de su finca y, según dijo, “se dan de muy buena calidad”.

Almacén de agua

Un tanque australiano, es decir, un tanque metálico fabricado con láminas de acero corrugadas, es lo que se utilizan para almacenar agua para el riego de la siembra.
El tanque tiene una capacidad de 200.000 litros, el cual resulta insuficiente, a pesar de trabajar con sistema de riego por goteo.

“El agua que se almacena solo rinde para una semana”, afirmó Ignacio Camacho, trabajador de la finca.

Explicaron que hacen lo que esté a su alcance para mantener la producción y no siembran mayor cantidad de matas para evitar que se pierdan por falta de agua.