Temporadistas buscan variedad. / Foto: DANIEL RAMÍREZ

14 Jul, 2014 | El recurso playa es apenas un "abrebocas", a la hora de abordar con interés y sentimiento a la isla de Margarita como destino turístico. Es el criterio de Julie García Longart (julieglongart@gmail.com), estudiante del sexto semestre de Licenciatura en Turismo, en la Universidad de Oriente núcleo Nueva Esparta, quien se comunica con esta sección vía correo electrónico.

"La isla de Margarita, considerada por excelencia destino de sol y playa, fue el primer destino turístico que se comenzó a desarrollar en Venezuela. Debido a la forma espontánea en que surgió la actividad turística en la Isla, y no bajo una adecuada planificación de actividades en el tiempo, podemos comprender que contenga gran número de debilidades. Entre éstas puedo mencionar la baja o poca identificación que poseen las comunidades con la actividad turística. Esto también producto de la escasa sensibilización o formación turística que poseen los habitantes". Sugiere atender esta deficiencia con cursos o conversatorios de carácter netamente turístico en sectores que cuenten con un alto índice de visitantes, "creando así una mayor conciencia en la comunidad, de la importancia que posee el turismo para el crecimiento de sectores y pueblos".

En cuanto a seguridad se refiere, deberían fomentarse e incrementarse más planes y estrategias para la protección al turista, en los diversos sectores de la isla de Margarita, incluyendo playas, montañas, castillos, museos y centros comerciales, buscando obtener una alza de visitas, nacionales e internacionales. Igualmente, poner en marcha una campaña de recolección de basura y concienciación de todos y cada uno de los habitantes de la Isla.

Buen destino

"Margarita es un destino que cuenta con hermosas playas, pero no solo eso, además montañas, una rica y amplia gastronomía, estupendos atractivos de carácter cultural, de gran relevancia histórica en el país. Si logramos hacer que nuestra actividad turística funcione y ande como debe ser, siempre de la mano de nuestro amigo el medioambiente, y con el trato cordial, tendremos una verdadera isla turística. Tenemos mucho más que ofrecer...", señaló una estudiante universitaria en contacto con el Sol de Margarita.